Se usa para el colesterol alto, el asma, la osteoartritis, la artritis reumática, la diabetes, el malestar estomacal y un trastorno de sangrado llamado trombocitopenia púrpura. Tambien se toma alfalfa como una fuente de vitaminas A, C, E y K4 y de minerales como calcio, potasio, hierro y fósforo.